¿TIEMPO de trabajo o ESPACIO de vida?

Cuando le digo a un cliente que casi no me queda espacio para un nuevo proyecto o que ya no tengo agenda disponible, lo primero que piensa es que estoy muy ocupado. Qué éxito que estoy tan ocupado, ¿verdad? No es así. Me explicaré:

Desde siempre, las personas ofrecemos nuestro tiempo a cambio de un salario. Lo que hacemos es vender nuestro tiempo, y esto se realiza a través del trabajo, como un medio de intercambio entre ambos.
Ahora bien, lo que me di cuenta hace años es de la diferencia entre “tiempo de trabajo o espacio de vida”: trabajar es un deber o le debemos a la vida vivirla?
Como en mi caso ya no trabajo para sobrevivir (lo cual me coloca en una posición privilegiada), no doy mi tiempo x trabajo ni decido que mis condiciones laborales estén basadas en la remuneración del tiempo vendido a un trabajo determinado, sea el que sea. Y menos todavía vincular unos ingresos a unas necesidades para vivir, algo que creo es ciertamente engañoso en esta sociedad (porque no necesitamos casi nada de lo que compramos). Así que mi vida privada tiene mucho más valor que mi esfera pública o laboral.

Lo que intento expresar es que en lugar de tiempo de trabajo, lo que hago es “blindar” ese otro espacio disponible que es mi vida y que se expande ocupando cada vez más espacio disponible (como el universo que no para de expandirse cada segundo). Así que cuando mi espacio lo otorgo a un tiempo de trabajo determinado por petición de un cliente, es cuando mi espacio vital se convierte puntualmente en tiempo laboral (lo que contrae mi espacio claro). Y eso tiene un valor económico (que no todo el mundo está dispuesto a pagar), y lo hago de esta manera porque de lo contrario siempre ganaría el trabajo y no mi espacio de vida, y porque al hacerlo tengo que responder inmediatamente a la pregunta: ¿qué cantidad de trabajo acepto y cuánto le dedico? No hemos de confundir las verdaderas prioridades. Y menos vender nuestra alma al diablo. Porque la manera en que repartimos el trabajo de la vida contemplativa marca nuestra razón de ser y de vivir.

Top