Happy es un lugar mental, aquel estado de ánimo que nos permite valorar aquello que somos y que tenemos. Normalmente, solemos pensar que somos y seremos felices a través de los estímulos del exterior: el trabajo, un nuevo coche, pareja, amigos… y sin duda, forma parte de nosotros. Pero la felicidad como un estado mental proviene realmente de nuestro interior. Estar en paz y en calma con uno mismo, relativizando los problemas y enfocado en aquello que deseamos ser nos permitirá proteger nuestra sensación de bienestar.
Al igual que para prácticamente todo en la vida, para tener un “happy mental” hay que prepararse.
Sin embargo, al igual que para prácticamente todo en la vida, para tener un “happy mental” hay que prepararse. Entrenarse para dejar de autoengañarnos, entrenarse para obviar nuestras autolimitaciones, entrenarse para dejar atrás nuestras emociones negativas, entrenarse para reducir nuestra ira, entrenarse para soltar y desapegarse de las cosas, entrenarse para cambiar de hábitos, y de esta manera reproducir en nuestra mente impresiones y percepciones ilusionantes y optimistas que nos dirijan a acciones reafirmantes y positivas. Todo con el objeto de eliminar los obstáculos mentales que nos ponemos a nosotros mismos y así ganar en fortaleza mental.
Potenciar el amor, el humor, no tomarnos tan en serio las cosas, dejar de dañarte y dañar a los demás, aceptarte tal cual eres y a los demás tal cual son, ser más consciente de tus pensamientos y conductas y alegrarte de tu buena vida, transformarán tu mente.
Bienvenido a “happy mental”.