Se cuenta en un antiguo cuento africano que un aventurero avanzaba en una tierra inhóspita de África acompañado únicamente por sus porteadores. Machete en mano, se iban abriendo paso entre la vegetación de la selva, tratando de desvelar los caminos. La idea era avanzar hacia adelante, superando cualquier obstáculo: ríos, montañas, barrancos… Avanzar y avanzar, era su única obsesión.
En un momento del extremo camino, vio como sus porteadores se habían detenido a descansar. “¿Qué hacéis, por qué os habéis parado? ¿Estáis cansados?” – preguntó. Uno de ellos le miró y contestó: “No, señor, no estamos cansados. Pero avanzamos tan deprisa y sin saber adónde, que hemos dejado atrás nuestra alma. Ahora debemos esperar hasta que nos alcance de nuevo”.
Te invito en estas vacaciones a reconectar contigo mismo/a y con tu entorno. Volver a tu centro. Y así recuperar tu alma, que la dejaste detrás de ti. Ahora que estás descansando, regálate momentos para estar más tranquilo y relajado y, de esta forma, cargar tu energía.
Unos cuantos consejos:
-Entra en contacto con la naturaleza.
-Realiza actividades que conecten con tus pasiones.
-Alterna las actividades de acción y de reposo: Realiza ejercicio físico y también lee y/o escribe con actitud positiva y superadora que te aporte autoconocimiento.
-Come sanamente.
-Realiza ejercicios de relajación, visualización y meditación. Recuérdate que respiras y centra tu atención en ella para acallar el ruido de la mente.
-Duerme adecuadamente.
-Juega con tu sexualidad.
-Genera amor, date afecto, comparte amor.
Porque un adecuado manejo de tu energía en estas vacaciones te permitirá conectar con tu yo y activar tu centro de comprensión.