El aprendizaje sale del aula

“La educación llega a través de la experiencia en la vida, no del aula” (Roger Schank)

Grupo 1:

IMG_1751[1]Durante esta semana, estamos vivenciando por las tardes un entorno de aprendizaje en la Universidad  Peruana de Ciencias aplicadas de Lima basada en la Gestión del Conocimiento, y por lo tanto, en lugar de que el 90% de la enseñanza sea a través de la clase magistral, estamos trabajando tan solo un 20% de clase y el resto del tiempo lo basamos en el trabajo colaborativo, en el desarrollo de nuestras competencias emocionales, en compartir blogs con nuevos y desafiantes post, en foros de reflexión, en buscar, producir y compartir información a través de la red, en pura innovación abierta con aprendizaje experiencial,  en el desarrollo de iniciativas y nuevos proyectos. Y siempre de forma agradable, divertida y lúdica, porque no hay conocimiento sin entretenimiento.

Grupo 2:

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 Vivimos en un mundo de permanente generación, difusión y aplicación de conocimiento. Y no sólo podemos aprender desde entornos como el  aprendizaje experiencial, coaching, e-learning, storytelling, … sino que se pueden usar las nuevas tecnologías y las redes sociales para estimular el aprendizaje y hacer de él un proceso más enriquecedor y participativo. Amig@s, los límites del aprendizaje no existen, han surgido nuevas formas de enseñar y aprender, la adquisición del conocimiento no pasa forzosamente por el aula presencial, sino que PUEDE PRODUCIRSE EN CUALQUIER MOMENTO Y LUGAR. Porque el conocimiento reside y parte de las personas que analizan, exploran, generan entornos donde se crean conexiones que producen innovaciones.  El profesor se convierte en un guía que apoya con herramientas el aprendizaje, el alumno se convierte en un participante activo que crea, opina, participa y comparte conocimiento y el capital humano de las organizaciones se convierte en un “thinking worker, un creative worker, un learning worker”. Un insight worker que trabaje basado en desarrollar nuevas y mejores formas de hacer las cosas, en procesos tanto de mejora continua como potenciando iniciativas innovadoras, incorporando en el proceso de maduración las mejores prácticas posibles.

Ahí va mi pregunta amig@s para la reflexión y la insurrección:

¿Cómo podemos fomentar en las organizaciones entornos inteligentes que catalicen un capital humano experto basado en el trabajador del conocimiento? (un knowledge worker que no solo aprenda, que no solo desarrolle conocimiento, sino al mismo tiempo que aprenda a obtener lo mejor de sí mismo gracias a trabajar diferentes estilos de pensamiento: conceptual, analítico, sintético, exploratorio, crítico, lateral, conectivo, inferencial, sistémico, abstractivo…).

Adelante amig@, postea y despliega tu creatividad.

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